PLASTILINA CASERA
Os
vamos a proponer una actividad que podéis hacer para vuestros peques y también
hacerlos con ellos si son más grandecitos. ¡Plastilina casera! Y lo vamos a
hacer con ingredientes que todos tenemos en casa: harina, sal fina, agua, aceite
de girasol y colorante alimentario. Sencillo, ¿verdad?
Además,
al ser ingredientes naturales no habría ningún problema si se la meten en la
boca; aunque tampoco es lo deseable, ¡¡¡está muy salada!!!
Bueno,
pues cambiamos el baby por el delantal y… ¡Empezamos!
Preparamos lo necesario:
-
2 vasos de harina.
-
¾ vaso de sal fina.
-
1 vaso de agua.
-
2 cucharadas de aceite de girasol.
-
Colorante alimentario.
-
Un bol.
-
Bolsa o tupper para guardar.
Elaboración:
-
Lo primero que haremos será mezclar en el bol la
harina con la sal y le vamos añadiendo agua poco a poco hasta que quede una
masa.
-
Luego, incorporamos el aceite de girasol para
que se ponga más blandita. Hay que tener en cuenta que la masa va a ir soltando
algo de aceite, así que no debemos pasarnos para que tampoco quede muy
pringosa. Más bien ir probando la cantidad que necesitamos. Yo la voy a dejar
durita porque ahora le voy a dar color añadiéndole más agua.
-
Ahora es el momento de añadir el colorante. Como
yo no tenía en casa, que normalmente sería en crema y se mezclaría bien tal
cual, voy a disolver azafrán en un poco de agua. Este paso es opcional; podéis
decidir dejarla en color natural, hacerla toda de un mismo color o sacar más
colores si disponéis de colorantes.
-
Hay que mezclar todo muy bien y… listo! Ya
tenemos nuestra plastilina casera!
NOTA:
-
Una cosa importante; recomiendo dejar reposar la
masa un poco en papel absorbente para que termine de soltar el aceite o el agua
sobrante.
-
Para conservarla se aconseja guardar en una
bolsa con cierre o un tupper en el frigorífico, esto garantizará mayor
durabilidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario